No te olvidamos, "Big Ben" Wallace

Este artículo no es más que un pequeño tributo a uno de mis jugadores preferidos de todos los tiempos. Un tributo a un jugador que me marco sobretodo a la hora de jugar al baloncesto, ya que me enseño que hay diferentes formas de triunfar en el basket. Un jugador que nunca se rindió y cuya actitud le llevo muy lejos, hasta tal punto de dejar huella en la mejor liga de baloncesto del mundo. Un jugador que ha estado infravalorado y sigue estando infravalorado. Un jugador que acabo siendo uno de los mejores defensores interiores de la NBA. Un jugador llamado Ben Wallace.

Por Enrique Suárez, @AlJeffersonista.

Foto: Turner

Según la RAE, se entiende como intimidación la capacidad que tiene un individuo de causar o infundir miedo.Cuando en términos baloncestísticos nos referimos a que un jugador es intimidatorio, nos referimos a que ese jugador es muy duro y agresivo, y que te piensas dos veces si atacar el aro cuando ese jugador te está defendiendo.

Ben Wallace podría ser la clara definición de un jugador intimidatorio. Bajo esa increíble musculatura nos encontramos a un jugador duro, agresivo y que se dejaba la piel en cada partido.

La carrera baloncestistica de Ben Wallace empezó de la peor manera posible, como si de una película de Hollywood se tratase  Tras pasar su etapa universitaria en la Universidad de Virginia Union, ningún equipo lo escogió en el Draft, por lo que no fue drafteado. Pese a ello,Wallace no se rindió y siguió trabajando para intentar jugar en la NBA. Su trabajo se vio recompensado, ya que los Washington Wizards se interesaron por aquel jugador que no pasó por el draft.

Su etapa en los Wizards, como era de esperar,no fue muy destacada. Era un jugador de rotación y apenas contaba con minutos suficiente como para demostrar su calidad. Tras tres temporadas viviendo en la sombra, Wallace fue traspasado a Orlando, donde jugo una temporada con el mismo panorama aunque si es cierto que contó con más minutos y  jugó su primer partido como titular. Pese apenas contar con minutos, Ben Wallace fue mostrando poco a poco su perfil de jugador: Defensor, reboteador y persistente. Tras una temporada en Orlando, volvió a ser traspasado, esta vez a los Detroit Pistons, donde se labro la huella de "Big Ben Wallace"

Ben Wallace con los Wizards | Photo: itsallaboutnba.blogspot.com

"Queremos contratarte.Llevas dentro el baloncesto de Detroit".Esto significó mucho para Wallace, ya que él admiraba el juego duro e intenso que empleaban aquellos míticos Bad Boys de Detroit hacia unos años atrás. Y quería demostrar al mundo de lo que era capaz.

Estando en Detroit, Ben Wallace se consagro como uno de los mejores jugadores interiores de la NBA. Pese a que no contaba ni con un tiro decente, ni con una visión de juego deslumbrante ni con apenas recursos técnicos, Ben consiguió, a su manera, dejar una marca en la liga.

La capacidad defensiva de Big Ben era innegable. Conjugaba a la perfección su físico y su capacidad intimidatoria para defender a cualquier jugador interior de la liga, ya fuera más rápido o más alto que él. En su medida, Wallace se encargaba de realizar el trabajo sucio del equipo, tarea que le gustaba realizar ya que, según el, " El trabajo sucio es para los tipos duros".

Otro aspecto a destacar fue su pensamiento de no rendirse jamás. Wallace le ponía,hablando mal y pronto, cojones a todos los momentos del partido, fueran ganando de 20 o perdiendo de 30. Wallace siempre jugaba al máximo nivel, aspecto que le destaco en su carrera.                                    

Wallace fue el anclaje defensivo de aquellos Pistons que consiguieron el anillo en 2004 ante Los Angeles Lakers de Shaq, Kobe, Payton y Malone en unas Finales donde los de Detroit fueron muy superiores a los Lakers tras acabar con ellos en el quinto partido de la serie(4-1).Ben Wallace fue uno de los jugadores más destacados al defender brillantemente al mejor pivot de la liga, Shaquille O´Neal.

"Nadie nos daba opciones.Ellos tenían mejores jugadores.Sí,reconozco que tenían mejores jugadores,pero nosotros teníamos un mejor equipo"

Wallace celebrando el título de campeones | Photo: buymeposters.com

Ben Wallace, además, gano 4 premios al mejor defensor del año estando en Detroit, empatando el record con Dikembe Mutombo, lo que nos afirma que Ben Wallace fue, claramente, el mejor defensor de la época.

Tras 6 temporadas en Detroit jugando al máximo nivel, Ben Wallace fue traspasado a Chicago, donde, debido a unas constantes luchas con lesiones, se confirmo lo peor: El principio del declive del gran Wallace. Posteriorme, fue traspasado una vez más a los Cavaliers de LeBron James que, pese a rendir a un buen nivel, no logro el ansiado anillo. Volvió a Detroit como agente libre, donde pasó sus últimos años de carrera como un jugador de rotación.

Fue en la temporada 2011-2012, su última temporada, donde batió el record de mayor numero de partidos jugados por un jugador sin pasar por el Draft, dejando un legado casi imposible de batir por cualquier jugador que llege a la NBA sin pasar por el Draft.

Ben Wallace, ya fuera por su peculiar peinado afro, por su filosofía o  por su juego, dejó huella en la NBA. Su capacidad defensiva, su filosofia luchadora y persistente y su juego intimidatorio le basto para consagrarse como uno de los mejores defensores de la historia de la NBA.

El día que vi a Ben Wallace jugar su último partido NBA ante los 76ers, no pude evitar emocionarme. Fue un jugador que me marco, probablemente porque yo era como el. Un jugador que apenas contaba con recursos en ataque, pero al que le gustaba defender. Le encantaba. Al fin y al cabo, era su estilo de vida.

Gracias por todo Ben.

Photo: nba.com